Durante una semana de actividades, el II Encuentro de Danza de Mazatlán culminó tras 30 clases maestras, 5 conferencias, 5 conversatorios, un espacio de vinculación titulado ConectArte y 7 presentaciones en el Teatro Ángela Peralta que tuvieron entre sus invitados a 45 bailarines egresados de la EPDM.

En esta última presentación en el Teatro Ángela Peralta los ex alumnos de la EPDM vieron como sus “hermanos menores” se apropiaron del escenario con 10 coreografías creadas por ellos mismos y sus maestros.

Se trató de un espacio para la profunda reflexión sobre el quehacer dancístico; ya sea por el vendaval de emociones que evocaron las piezas, el atrevimiento conceptual de sus estructuras o las mismas demostraciones físicas que se traducen en varias horas de ensayo.

El programa transcurrió  entre Jeap ‘sí (Corazón) de Alicia Bacasehua y Manuel Hernández,  Entre Llanada de Maritza G. Elizalde y Regina Chávez; Soltura de Dalila Medina;  Eter de José Ángel y Eric Soto y Santiago por Katia Rivera, Miles Kearley, Katya García y Ángel García, en el primer tiempo.

En Deber ser de Vanya Saavedra y Eric Soto; Bismol de Alexandra Elenes Soltero; 4301 Km de Marco Martínez, Diego Alcalá y Karen Vilchis;  Estatuto del hambre de Lola Ramírez, Katia Rivera, Vanya Saavedra, Jonathan Alavés, Yesid Andrés y Miles Kearley y Gravitatoria interpretada por los bailarines de 2° 3° y 4° año, obra  de  Xitlali Piña, Daniel Marín y Johnny Millán, los bailarines demostraron que la danza no solo es un medio para entretener,  es un arte para conectarse con el público y compartir sentimientos, emociones, ideales y reflexiones de sus preocupaciones y grandes  pasiones.

Al terminar la presentación se observó la satisfacción de los alumnos de la EPDM al recibir los aplausos de un público que ama  la danza contemporánea.

Posteriormente  Raúl Rico González, director general del Instituto de Cultura de Mazatlán,  inició  la ceremonia de clausura del II Encuentro de Danza de Mazatlán.

Comentó que la idea de realizar el II Encuentro no solo fue reunirse y compararse como artistas, sino revisar con sentido crítico la realidad de la danza contemporánea que desde hace 20 años se crea y practica en esta escuela.

Felicitó a Delfos danza contemporánea y a los participantes del Encuentro porque tuvieron la oportunidad de verse en un espejo para reforzar la idea de que la danza no solo es bailar,  es mensaje, estética,  tener claro el público al que quieres llegar y la integridad artística, entre una serie de temas que ayudarán en los siguientes años a reflexionar sobre el quehacer de la danza contemporánea.

En representación de Delfos danza contemporánea y la Escuela Profesional de Danza de Mazatlán, Claudia Lavista expresó su felicidad ante la realización de este evento que  reflejó   20 años de intenso trabajo.

Lavista destacó que lo más importante de este II Encuentro de Danza de Mazatlán, es que le permite a ella y a sus compañeros de Delfos mirar hacia el futuro, pensar en que se pueden reinventar como maestros para ayudar a que sus alumnos encuentren su camino y voz propia en los terrenos de la danza.

Dijo sentirse orgullosa de poder ver de nuevo a aquellos jóvenes que pasaron de ser sus alumnos a sus colegas, tenerlos como artistas maduros presentando sus propias clases en la escuela y encontrarlos en distintos festivales donde pueden compartir opiniones y retroalimentarse con esas diferencias que hacen crecer a ambas partes.

La maestra, bailarina y coreógrafa  invitó al escenario a los maestros de la EPDM; a los invitados especiales del encuentro: Patricia Cardona (investigadora de danza), Rosario Manzanos (crítica de danza), Javier Contreras (filósofo de danza) y Cuauhtémoc Nájera, Coordinador de Danza del Instituto Nacional de Bellas Artes y "al mayor cómplice" Raúl Rico González, director general del Instituto de Cultura de Mazatlán; juntos develaron una placa conmemorativa por los 20 años de fundación de la EPDM.

El reconocimiento incluye los nombres de los maestros, artistas, funcionarios, directores del Instituto de Cultura de Mazatlán y presidentes municipales que han contribuido a que la prestigiada institución  se posicione como uno de los centros dancísticos más importantes de México, a 20 años de su creación.